Avión de Panicua

Paja de trigo y palma tejidas en
Tzintzuntzan, Michoacán

México aprovecha 57 diferentes fibras vegetales para la artesanía, en todas las regiones del país según el clima y los planes de aprovechamiento sustentable; se siembra, cuida y cultiva, recolecta, se transforma, limpia, lava, se tiñe y se teje. Entre el primero y el último paso, podría haber muchos meses, por ello la artesanía es única y valiosa, cultural y monetariamente.

Siendo unos de los materiales de mayor deterioro, es común comprar varias veces en la vida un soplador, un petate, un sombrero. En los mercados populares o buscando un poco más, encontramos obras del Valle del Mezquital, de Tequisquiapan, de los Valles Centrales de Oaxaca, de la Mixteca, de Santa Apolonia Teacalco, de Tlamacazapa, de Santa Ana Tlalpaltitlán, de Calkini, de varios poblados Tarahumaras o de Tierra Blanca, entre muchas otras poblaciones de sesteros y sombrereros.